«No me puedo parar»: El preocupante presente de Bastián Paz

Después de varios años de ausencia, Bastián Paz, quien en 2013 se ganó el corazón del «Monstruo» de Viña del Mar obteniendo antorcha de plata, antorcha de oro y gaviota de plata, vuelve a ser noticia con un objetivo claro: volver a conquistar la Quinta Vergara.

Un regreso lleno de humor y nuevas propuestas

En una entrevista reciente con La Hora, el humorista compartió sus deseos de retornar a uno de los escenarios más importantes de Latinoamérica, ahora con una rutina renovada.

“Lo único que quiero es poder llegar de nuevo a Viña, tengo rutina nueva y está bien chistosa”, expresó con entusiasmo.

Además, adelantó que el tono de su show será diferente: «picarona, pero suavecita aunque si quieren sin censura también se puede hacer algo ahí», comentó, dejando abierta la posibilidad de adaptar su humor al gusto del público.

La nueva realidad de Bastián Paz

Un cambio físico, pero no de actitud

Hoy, Bastián Paz enfrenta serios problemas de salud que alteraron significativamente su vida cotidiana. Las enfermedades que padece —histiocitosis X, hipertiroidismo y síndrome cerebeloso— han afectado su movilidad, llevándolo a utilizar silla de ruedas.

«Yo ahora estoy en silla de ruedas. No me puedo parar», relató, aunque dejó claro que su espíritu se mantiene inquebrantable.

«Yo siempre sigo feliz, pese a los que me pase, siempre feliz y haciendo nuevos chistes para poder volver estar en Viña y vivir ese momento que está para siempre en mi memoria», agregó, mostrando su permanente optimismo.

Un diagnóstico que cambió su vida

Aunque nació sano, su vida dio un giro a los cuatro años y medio, cuando fue diagnosticado con un tumor en la cadera que luego afectó también su pelvis y una costilla. Además, convive con diabetes insípida, condición que ha requerido de gran resiliencia a lo largo de los años.